HAZ EL BIEN SIN MIRAR A QUIEN

Las leyes fundamentales de la vida enseñan que todo lo que hacemos a los demás, retorna a nosotros multiplicado.
Ya lo dijo hace más de 2000 años el Maestro Jesús: “Lo que siembres, cosechareis”.
También lo afirman las conocidas frases: “Ojo por ojo, diente por diente”, y “El que a hierro mata, a hierro muere”.

Absolutamente nada queda impune en la vida. Aquellos que dicen que la vida es injusta están equivocados. Puede ser que la justicia humana tenga falencias, pero la justicia Divina no falla jamás.
No es que vayamos a parar al infierno tras nuestra muerte, sino que aquí en nuestras vidas obtendremos el resultado de nuestros actos.
Si quieres que tu vida marche bien, debes hacer bien las cosas. Hazte consciente de tus actos, ten mucho cuidado porque hasta lo que pienses y digas de los demás tendrá su consecuencia.
Haz el bien en todas las oportunidades que tengas, brinda tu ayuda desinteresadamente y serás ampliamente bendecido.

¡Hacer el bien es mejorar el mundo y acumular puntos a nuestro favor!

Afirmación:
“Yo siembro el bien y cosecho solo el bien”