Estaba en un día de clases en la secundaria, cuando entró la profesora al aula y vio a su alrededor trozos de tiza desparramados en el suelo.
Nos dijo una frase que me quedó marcada hasta el día de hoy: “No derrochen lo que tienen en abundancia, porque algún día lo van a necesitar”.
En ese momento me acordé de las veces que tuve algo copiosamente y justamente porque tenía de sobra lo desperdiciaba hasta que no quedara nada.
Esta frase la relaciono con ésta otra parecida y muy popular: “Uno valora lo que tiene recién cuando lo pierde”.
Tener siempre presente estas dos frases modificó mi conducta, me hizo valorar y cuidar cada cosa que llega a mi vida.
Y cuanto más las valoro, más cosas (buenas) me llegan.
Recuérdalo:
-No derroches nada de lo que tienes, y
-Valora todo lo que tienes.
Afirmación:
“Soy feliz con todo lo que tengo”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario